En marzo del 2006 la legislatura de Puerto Rico decidió rendirle homenaje al vendedor de flores vinculado a asesinatos de independentistas, Julito Labatut. Gracias a la situación judicial que este homenaje provocó sobre algunas personas, decidimos también rendirle homenaje a Julito con el propósito principal de brindar solidaridad desde afuera a los enjuiciados. Para esta pieza el medio utilizado lo fue la máscara tipo “cabezudo”.
En barro se esculpió de un negativo de este señor y del mismo sacamos tres máscaras iguales. Andando dos con armas largas de cartón, uno con un maletín y los tres con flores en sus chaquetas, buscamos criticar la realidad, donde es homenajeado un empresario vendedor de flores con historial de asesinar activistas.